Yo me lanzo de cabeza al agua
y allá abajo contengo la respiración,
y me quedo tan quieto,
que las imágenes y las palabras me rozan como peces.
Es así como comienza todo.
A veces los peces son puñales de plata,
y a veces espejos donde admirar el mundo.
Es como un nuevo orden natural
en el que mis pulmones son solamente ocho letras distribuidas en tres sílabas,
y entonces es mejor respirar a través de los puñales y de los espejos.
Es así como comienza todo.
Yo me lanzo de cabeza al agua y allá abajo...
y qué hago yo después de leerte?
ResponderEliminarcómo comienzo de nuevo?
No tienes que hacer nada. Tú buceas tanto como yo ;-)
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